“Lo que me cautivó de Larimar fue su enfoque innovador y su compromiso con la calidad de vida de las personas, creando una ciudad jardín donde se potencia el entorno natural liberando espacios con edificios en altura.

Desde el inicio, me impresionó su ambición de crear una ciudad inteligente, no solo como un lugar para vivir, sino como un modelo de desarrollo urbano. El entorno del farallón, con sus vistas espectaculares, enriquece cada aspecto del diseño arquitectónico, con playas, áreas de experiencias compartidas, restaurantes, áreas comerciales, hoteles, campos de golf y todos los servicios necesarios para una ciudad moderna de primer nivel.

Además, el equipo detrás de Larimar es excepcional: profesionales comprometidos con una visión compartida de excelencia y sostenibilidad. Yo, básicamente, intento aportar mi experiencia y una perspectiva global a este proyecto único. Como arquitecto apasionado y defensor del diseño sostenible, trabajar en Larimar es una oportunidad increíble para aplicar mi amor por la arquitectura en un proyecto que realmente marcará la diferencia.”